Eric Coquerel acusa a Emmanuel Macron de utilizar LFI como pretexto para bloquear al gobierno del NFP

Eric Coquerel, diputado de La France Insoumise (LFI) y presidente de la comisión de finanzas de la Asamblea Nacional, criticó duramente a Emmanuel Macron en franceinfo, acusándolo de utilizar la posible presencia de ministros de LFI en el gobierno como excusa para impedir el nombramiento de Lucie Castets al cargo de Primera Ministra.

El parlamentario reaccionó ante las amenazas de censura contra un posible gobierno liderado por el NFP. Mientras Macron continúa sus consultas para nombrar un nuevo primer ministro, Coquerel afirmó que la negativa a nombrar a Castets es una estrategia destinada a evitar la implementación del programa legislativo del NFP, que ganó las recientes elecciones legislativas.

“Una excusa para evitar el cambio”

Coquerel sostuvo que la presencia o ausencia de ministros del LFI dentro del gobierno es sólo un pretexto. El verdadero problema, dijo, es la renuencia de Macron a aceptar el resultado de las elecciones, lo que marca un rechazo a sus políticas. “El presidente debe demostrar lo contrario”, lanzó Coquerel, reiterando que la prioridad del NFP es hacer respetar el mandato electoral mediante la aplicación de su programa.

La propuesta de Mélenchon: una prueba para Macron

Esta posición se hace eco de la reciente intervención de Jean-Luc Mélenchon, quien propuso que un gobierno dirigido por Lucie Castets, incluso sin ministros del LFI, pudiera ser autorizado a gobernar sin temor a la censura. Mélenchon planteó esta pregunta a la actual administración: ¿permitirían que dicho gobierno implementara el programa que obtuvo la mayoría en las elecciones legislativas?

¿Resistencia al retorno de la izquierda?

Coquerel también sugirió que la renuencia a nombrar a Castets se debe a un temor más amplio a un regreso de la izquierda. Acusó a Macron y sus aliados de intentar eludir la voluntad democrática, especulando que inicialmente habían anticipado otro resultado, tal vez incluso una victoria de la extrema derecha. "Temen el regreso de una izquierda digna de ese nombre", afirmó Coquerel, subrayando que el éxito inesperado del NFP trastocó estos planes.

Durante la misma entrevista, Coquerel también respondió a las recientes críticas que vinculan a LFI con el ataque a una sinagoga en La Grande-Motte. Denunció cualquier intento de asociar al LFI con tales actos como una calumnia por motivos políticos, defendiendo la posición del partido sobre el conflicto palestino-israelí como arraigada en una búsqueda de la paz mediante el reconocimiento del Estado palestino.

Mientras continúa el impasse político, los comentarios de Coquerel subrayan las crecientes tensiones entre la administración Macron y la recién victoriosa coalición NFP, planteando interrogantes sobre el futuro de la gobernanza en Francia.