Emmanuel Macron condena los ataques israelíes contra las fuerzas de paz en el Líbano: “Absolutamente inaceptables”

12 2024 octubre / Reunión

El presidente francés, Emmanuel Macron, condenó enérgicamente los recientes ataques israelíes que alcanzaron posiciones de los Cascos Azules en el Líbano y causaron cuatro heridos leves. Estos ataques, calificados de “deliberados” por el jefe de Estado, tuvieron como objetivo la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (FPNUL), particularmente cerca de su cuartel general y de una torre de observación.

En una declaración desde Chipre, donde se celebra una cumbre de los países mediterráneos de la Unión Europea, Macron denunció estos bombardeos: "Los condenamos, no los toleramos y no permitiremos que vuelvan a ocurrir". Recordó que estos disparos contra las fuerzas internacionales de mantenimiento de la paz constituyen una “grave violación del derecho internacional”. París, indignada por la situación, convocó al embajador de Israel, iniciativa adoptada también por varias otras naciones, incluido el Reino Unido.

En el mismo discurso, Emmanuel Macron reiteró su llamado a suspender las exportaciones de armas a Gaza y el Líbano, destacando que esta es la “única palanca” para poner fin a la violencia actual. Sin embargo, se preocupó de aclarar que esta medida no tenía como objetivo "desarmar a Israel" frente a las amenazas que pesan sobre el país, deseando así aliviar las tensiones con el Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que había expresado su descontento por las siguientes estas declaraciones.

Israel se explica, Macron se mantiene firme

Por su parte, Israel dijo que no estaba atacando intencionalmente a la FPNUL, señalando a Hezbollah por su proximidad a las instalaciones de los Cascos Azules, lo que, según las autoridades israelíes, alentaría tales incidentes. El ejército israelí también anunció la apertura de una investigación para esclarecer las circunstancias de los tiroteos.

Mientras continúan los combates entre el ejército israelí y Hezbollah en el sur del Líbano, la comunidad internacional expresa una creciente preocupación por la escalada de tensiones. La cumbre Med9, que reúne a los países mediterráneos de la UE, abordó esta crisis, sin que por el momento parezca posible una solución diplomática.